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La meteorología es una ciencia interdisciplinaria que se dedica al estudio de los fenómenos que ocurren en las capas bajas de la atmósfera. Su aplicación permite conocer los pronósticos del clima a corto plazo.
En la agricultura, la información generada desde esta ciencia es usada para planificar los sistemas de producción. El estudio de la meteorología para la agricultura lleva por nombre agrometeorología.
¿Cuál es el objetivo principal de la meteorología?
El principal objetivo de la meteorología es entender los fenómenos atmosféricos para poder predecirlos.
Para ello se centran en la observación de variables como la temperatura, humedad, presión atmosférica, radiación solar, velocidad y dirección del viento, precipitaciones, etc.
La meteorología es una ciencia que busca mejorar nuestros conocimientos sobre los fenómenos atmosféricos.
Otro punto que se puede considerar como objetivo de esta ciencia es el de proporcionar información sobre el estado del tiempo atmosférico, a través de la vigilancia continua de la atmósfera.
Cumplir con todos sus objetivos es lo que permite identificar los fenómenos meteorológicos y estudiar cómo afectan todas las actividades económicas, particularmente a la agricultura.
Donde la información generada sirve para, por ejemplo, escoger el mejor día de aplicación de fertilizantes, tipo de labranza a usar, día para sembrar, entre otras actividades.
Importancia de la meteorología para los cultivos
La agrometeorología es la rama de la meteorología que se encarga de asesorar a los agricultores sobre cómo aprovechar los aspectos del clima para reducir los daños en la producción agrícola, causados por el mal tiempo.
De acuerdo a investigaciones la agricultura sufre el 26% de los daños y pérdidas que se producen durante los desastres relacionados con el clima en países en desarrollo.
Pero con la información del clima podrían gestionarse mejor las acciones para reducir estas pérdidas.
Además, otro uso de esta información, es que te sirve para planificar más inteligentemente las labores agrícolas. Seleccionando con mayor precisión los cultivos a sembrar, cuándo sembrarlos, el momento ideal para sus cuidados fitosanitarios, etc.
Por otra parte, el simple hecho de conocer con exactitud si un día va a llover o no, puede evitar el desperdicio de agua. Se estima que puede reducirse hasta un 10% las exigencias de agua, sin que se afecte el rendimiento de la cosecha.
¿Cómo podemos pronosticar los cambios meteorológicos?
Los cambios en la atmósfera se siguen con instrumentos que incorporan sensores que detectan las variaciones climáticas. Estos junto a técnicas de análisis de datos permiten crear un diagnóstico especializado.
La mayoría de los equipos se colocan en el campo dentro de las estaciones meteorológicas. Estas son emplazamientos que tienen como fin el registro constante del estado de la atmósfera en una región en específico.
Equipos de medición
Para poder hacerlo, ellas deben tener los siguientes equipos de medición:
- Anemómetro. Este instrumento se utiliza para determinar la velocidad del viento.
- Veleta. Se usa para indicar la dirección del viento en base a los puntos cardinales.
- Barómetro. Sirve para medir la presión atmosférica.
- Heliógrafo. Sirve para medir la intensidad lumínica solar.
- Pluviómetro. Mide la cantidad de lluvia caída.
- Higrómetro. Se usa para registrar el grado de humedad del aire.
- Termómetro. Mide la temperatura ambiental.
Junto a las estaciones meteorológicas, los datos del clima pueden seguirse a través de satélites meteorológicos. Estos son satélites artificiales que orbitan la tierra y detectan las variaciones en la atmósfera.
Normalmente estas estaciones y satélites pertenecen a institutos de investigación, por lo que el acceso a sus datos debe gestionarse a través de ellos. Eso en ocasiones puede complicar un poco el trabajo agrícola.
La meteorología se apoya en el uso de sensores que se ubican en las estaciones meteorológicas y satélites.
Por suerte, actualmente puedes contar con tus propios equipos de detección meteorológica, instalando Estaciones Meteorológicas Compactas. Se trata de un sistema todo en uno que incorpora sensores meteorológicos.
Este equipo posee, como su nombre lo indica, un tamaño compacto y su instalación es sencilla.
Es capaz de registrar: precipitaciones, temperatura del aire, humedad relativa, velocidad y dirección del viento, radiación solar, presión atmosférica y descargas eléctricas.
Es un instrumento común en agricultura inteligente o de precisión, usado para la detección de heladas, medición de la humedad del suelo, control del riego, uso para invernaderos, control de plagas, enfermedades, etc.
Conclusión
La meteorología es una ciencia que realiza grandes aportes en la prevención de desastres naturales y su gestión. Pero también es de gran ayuda para sectores productivos como la agricultura.
En esta disciplina mejora la planificación de las actividades y administración de recursos. Por ejemplo, la información que genera permite hacer un uso más racional del agua.
Gracias a esta ciencia un agricultor puede aplicar estrategias de agricultura de precisión, usando los datos meteorológicos para tomar la mejor decisión sobre el lugar y momento correcto para llevar a cabo acciones que mejoren su productividad.
Hoy en día, todos estos datos están a tu alcance. Puedes instalar estaciones meteorológicas compactas, como las que ofrecemos en SensorGo. Equipos certificados que cumplen con los estándares de la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Contáctanos si deseas conocer más sobre ellas.
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