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Las ráfagas de viento son fenómenos climatológicos que son verdaderamente peligrosos. Son capaces de levantar techos, derribar líneas eléctricas, arrancar árboles, incluso, empujar automóviles.
Son eventos que pueden ser verdaderamente mortales y que pueden ocurrir sin previo aviso. Tu responsabilidad es comprender sus riesgos y prepararte para que, cuando ocurra, los daños sean los mínimos posibles.
¿Qué precaución debe tomarse en caso de ráfagas de viento?
Los vientos fuertes o rafagas de viento son comunes cuando están ocurriendo tormentas, tornados, huracanes, etc. Se convierten en un peligro cuando su velocidad supera los 60 km/h.
Son un riesgo porque pueden comprometer la integridad de infraestructuras u otros elementos del entorno, por ejemplo, arrancar y tirar árboles. Por eso, este fenómeno meteorológico es particularmente peligroso si realizas operaciones o actividades al aire libre.
Las rafagas de viento son fenómenos meteorológicos en que los vientos incrementan su velocidad.
Por ejemplo, trabajos en altura, movimiento de personas, vehículos o maquinaria e izamiento de objetos o materiales, son actividades que incrementan su riesgo en presencia de rafagas de viento.
La precaución más importante frente a este fenómeno es la vigilancia del viento. Para hacerlo debes estar atento constantemente a los reportes climáticos de tu región y monitorear frecuentemente la velocidad y dirección del viento.
¿Cómo afrontar los trabajos a la intemperie con seguridad?
Los trabajos a la intemperie tienen la desventaja de tener que enfrentar constantemente los cambios en el clima. Las tormentas, huracanes, tornados y rafagas de viento, representan un riesgo elevado para los trabajos a realizar y la salud de tus colaboradores.
La mejor forma de afrontar los trabajos a la intemperie con seguridad es mantener bajo vigilancia constante los vientos. Controlando su velocidad y dirección.
Una herramienta para medir la fuerza de los vientos es la Escala de Beaufort. Es una escala del 1 al 12 que estima la velocidad del viento en función de los efectos del mismo en el entorno físico. Esta escala fue ideada por Sir Francis Beaufort, Comandante Real Británico, en 1805.
Ahora, aunque es una herramienta válida y útil, para mayor precisión es recomendable el uso de sensores meteorológicos. Por ejemplo, instalar en el área de operaciones una estación climática compacta que mide la velocidad y dirección del viento.
Para prepararte frente a las rafagas de viento, debes mantener bajo vigilancia constante la velocidad y dirección del viento.
Con la ventaja extra de que la mayoría de estos equipos se conectan al internet de las cosas. Usan esta facilidad para enviarte notificaciones hasta tu celular u otros dispositivos electrónicos.
Por ejemplo. Puedes programar que te envíen reportes cada cierto tiempo, por ejemplo, cada 3 horas. También puedes programarla para que cuando el viento supere determinada velocidad, te envíe una alerta inmediata.
Recomendaciones generales en caso de condiciones climatológicas adversas
Además de contar con sensores para detectar las rafagas de viento, hay otras acciones que puedes aplicar y complementar el monitoreo. Usarlas, incrementará la seguridad de tus trabajos.
Si te encuentras trabajando en la calle o campo, al aparecer rafagas de viento, es recomendable seguir estas acciones:
- Alejate de las cornisas, los muros o árboles que pueden caer o desprenderse.
- Si estás en trabajos de construcción o remodelación de edificaciones en mal estado, recomienda a tu personal que se aleje de la zona. Con anterioridad, establece un lugar seguro al que puedan moverse.
- Nadie debe subir andamios sin las adecuadas medidas de protección.
- No se protejan del viento en zonas próximas a muros, edificios o árboles en mal estado.
Ahora si tu y tu personal se encuentran conduciendo, es recomendable tener las siguientes precauciones:
- Es posible que ocurran caídas de cables y árboles, debes estar atento a ello en la vía.
- Conduce con cuidado o precaución porque los fuertes vientos pueden formar nubes de polvo.
- Si tu vehículo se ve afectado por las rafagas de viento, evita rebasar otros autos y ten precaución en cruces y puentes.
- Incrementa tu precaución. Disminuye la velocidad y enciende las luces de cruce y las ordinarias, especialmente cuando la visibilidad es escasa.
- Si te encuentras trabajando en zonas marítimas, debes seguir las siguientes recomendaciones:
- Alejate de la playa y zonas bajas que se puedan ver afectadas por las mareas y oleaje elevado. Ten en cuenta que los vientos fuertes influyen en las condiciones del mar.
Conclusión
Las rafagas de viento son fenómenos meteorológicos en los que la velocidad del viento incrementa. Cuando alcanza más de 60 km/h puede ser un factor de riesgo para los trabajos a la intemperie.
Entre las varias medidas de prevención que puedes seguir, el monitoreo constante de la velocidad y dirección del viento es la más eficaz. Porque minuto a minuto te mantiene informado del estado del viento. Lo que te permite actuar de forma inmediata en caso de cambios que pongan en riesgo el trabajo.
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